"Pensamos este libro como un puente entre mujeres, para sostener la necesidad de cambiar el paradigma vigente y transformarlo en el paradigma necesario para mejorar las condiciones del inicio de la vida. Nacer es un momento de vital trascendencia, y es por ello que respetar la forma y el contexto de cada nacimiento resulta tan importante. Porque es un hecho que nos marca a fuego en nuestros cuerpos, en nuestras mentes y en nuestras emociones" afirman Lorena, Rosario y Ana Clara

El libro alterna los testimonios de las madres, con aportes de distintos profesionales referentes en el mundo del Parto Respetado: médicos, parteros, pediatras, abogados, representantes de asociaciones civiles afines a la temática, etc.

"En Relatos Paridos, nos nacemos madres, padres y familias. Nuestros hijos merecen nacer en un ámbito de amor y de respeto, y nosotras, las madres, merecemos parirlos en libertad."

Una lectura necesaria para cuestionarnos, desnaturalizar lo que no es natural, rescatar el saber en manos externas y devolvérselo a los verdaderas protagonistas: las madres y sus hijos naciendo.

" ... El parto es el milagro. La parición supera lo sobrenatural y alienta el permanente desarrollo de la humanidad. No hay humanidad sin parto, no hay parto sin mujer. El género femenino, la mujer, no es revolucionario, es la revolución misma. Biológicamente se revoluciona y transforma con su período menstrual. Sociológica y culturalmente, definen sin excusas ser el poder concreto sobre el que radica el destino. De ahí, la resistencia patriarcal de una sociedad inconclusa. La violencia de género, la denostación moral, la sumisión forzada, la desvalorización de su identidad, son los síntomas de la tragedia cultural de nuestros días. La génesis del combate por la independencia cultural de la mujer, se basa y se sustenta en el milagro. El parto. La parición, vapuleada por la ignorancia cotidiana, estigmatizada en los mitos religiosos que la subestiman desde el relato, siempre fue sacudida por la irrespetuosidad. No respetar lo natural, flagelar lo sublime, es el arma artera del patriarcado a eliminar de una vez y para siempre. Este trabajo realizado desde el valor, ofrendado al lector para la concientización definitiva, es un instrumento indispensable para la erradicación del antivalor. La docencia que inspira a sus autoras, su esmero didáctico para la comprensión del fenómeno, nos permite entender a cada una de las narraciones expuestas. Los testimonios tatuados de suavidad en sus apasionadas y emotivas experiencias de parto, nos transmiten la luminosidad de una batalla cultural con final abierto. Gracias mujer, por permitirnos parir a quienes no gozamos del milagro. Lorena, Rosario y Ana Clara, paladines de este desafío enaltecido, son la reserva militante de una causa extraordinaria... El parto respetado, el parto natural, el milagro..."   Jesús María Plaza